Quisiera romper un poco el esquema de las publicaciones pasadas que he hecho en este espacio, y hacerlo un poco más personal, obviamente sin desligar la relación que tiene Magazieee con la tecnología. Siento que, al hablar de salud mental, se lo debe realizar con un acercamiento más cálido, en lugar de simplemente compartir cualquier novedad tecnológica. Mi objetivo es realizar una breve observación hacia nuestra actualidad social y tecnológica, y cómo esta afecta o aporta a nuestra salud mental.

No se puede desligar al ser humano de su entorno. Somos seres naturalmente sociales sobre los cuales, todo lo que nos rodea tiene afectación; y es innegable que en nuestra actualidad dicha sociedad es completamente tecnológica. El Internet es verdaderamente una creación maravillosa del ser humano que nos permite mantenernos conectados y acceder a una infinidad de información, pero el acceso a tanta cantidad de contenido variado ha generado un aumento de trastornos.

Las personas que consumen noticias negativas, disponibles en absolutamente todas las redes sociales, experimentan un aumento de ansiedad. La comparación que uno mismo se hace con respecto a los paradigmas establecidos por influencers y famosos iconos de “belleza”, puede llevarnos sin lugar a duda a problemas de autoestima. Incluso el excesivo tiempo de trabajo frente a una computadora es lo que lleva al conocido estado de burnout laboral.  Como humanos somos vulnerables y debemos saber cuidarnos de tanto contenido dañino presente y saber diferenciar, de todo lo que está disponible en la red, lo que nos hace crecer versus lo que nos destruye o minimiza. 

Los trastornos mentales no tienen discriminación de edad, raza o sexo, pero me pongo a pensar especialmente sobre los adolescentes o niños que están en proceso de formar su carácter y personalidad, y que están tan expuestos a la información. A mi parecer, la censura o prohibición nunca es la solución, pero si es necesaria una guía para evitar problemas futuros como la depresión.

A pesar de que poco a poco se habla más abiertamente sobre el tema, la salud mental sigue siendo un tabú para muchas personas.  En repetidas ocasiones, se toma a la depresión, ansiedad u otros trastornos en general como estados normales que se deben aprender a soportar y vivir, “Solo el loco necesita ayuda”, cuando no se dan cuenta que es algo que se puede tratar y muchas veces eliminar si es detectado a tiempo. Una vez superado el estigma sobre la salud mental, el primer paso que se debe tomar es buscar ayuda profesional, pero adicionalmente, y en contraparte a lo que he expuesto hasta ahora, la tecnología actual también nos puede brindar herramientas a las personas que necesitamos ayuda. Y eso exactamente es lo que propongo al lector, el usar nuestro poder de acceso ilimitado a la información para buscar contenido que nos brinde soporte en tiempos complicados.

Les comparto cómo he utilizado la tecnología personalmente en complemento a mi terapia psicológica. Existe una gran cantidad de libros digitales a los cuales se puede acceder; autores como Osho o Walter Riso, que están disponibles en línea, pueden ser un punto bueno de partida para el autodescubrimiento. También he podido aprender sobre meditación, que junto con playlist de sonidos de la naturaleza o música de relajación disponibles en Spotify, me han permitido crear en mi este hábito muy saludable que es el meditar.

En adición, he escuchado de aplicaciones sobre consejería psicología, la cual no se compara con una terapia personal, pero puede ser un punto de ayuda crucial para alguien en crisis emocional. Asimismo, existen canales de difusión de temas importantes como el mindfullness y orientación psicológica.

Es importante hacer conciencia sobre el cuidado de nuestra salud mental, y dentro de ese cuidado es importante escoger la información que consumimos. No nos dejemos agobiar de lo negativo de la sociedad. Pongamos un alto a la revisión de aquel contenido que nos está haciendo daño, y un último consejo saludable, dejemos de pelear con todas las  personas con las que no estemos de acuerdo en las redes sociales. 

Francisco Villacis

Nacido en Ambato, Ecuador en 1995. Ingeniero en Electrónica y Telecomunicaciones graduado en la Escuela Politécnica Nacional en Quito, Ecuador en el 2020.
Músico y artista por vocación.