CRISIS DEL COVID-19 NOS MUESTRA LA DEPENDENCIA DE LAS SOCIEDADES MODERNAS A LA ELECTRICIDAD

La civilización contemporánea depende para su existencia y desarrollo de varias fuentes energéticas; sin embargo, la nueva pandemia de coronavirus (COVID-19) detectado por primera vez en diciembre de 2019 en la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei, en China, ha creado una crisis financiera y sanitaria sin precedente, razón por la cual, la gran interrupción causada por esta crisis ha resaltado cuánto dependen las sociedades modernas de la electricidad. El coronavirus ha causado que, la mayor parte de la población se mantenga confinada en sus hogares en este momento, recurriendo a las plataformas virtuales para hacer que el teletrabajo parezca mucho más humano, al sentirse conectados. Simultáneamente, algunas escuelas, colegios y universidades han cerrado sus instalaciones, cambiando las clases a modalidad de educación a distancia.

Sitios de comercio electrónico para hacer sus compras de elementos esenciales y plataformas de servicio streaming para encontrar entretenimiento, nos muestra la importancia de reconocer los grandes beneficios que nos brinda la tecnología durante este tiempo de crisis, en el que las industrias globales, comunidades y ciudadanos se unen para encontrar una solución. Sin embargo, se debe tener bajo consideración que un abastecimiento de electricidad confiable respalda todos estos servicios, además de alimentar los dispositivos y equipos de vital importancia para el hogar, como el servicio de calefacción, aire acondicionado, refrigeradores, lavadoras o simplemente la parte de la iluminación de nuestros espacios, entre otras comodidades.

En muchos países, el servicio eléctrico es crítico para la operación y el funcionamiento durante todo el día de equipos médicos en los hospitales que atienden el creciente número de personas enfermas. En una situación tan inquietante y de rápida evolución, la electricidad también garantiza la comunicación oportuna de información relevante entre gobiernos y ciudadanos, y entre médicos y pacientes. Hoy, somos testigos directos de una sociedad que depende casi en su totalidad de la tecnología digital para continuar con la vida cotidiana.

En una sociedad así, la seguridad eléctrica es la base de la prosperidad y la estabilidad; por lo tanto, demuestra el papel central y la importancia de la electricidad, y lo que los responsables políticos deben hacer para garantizar que los sistemas actuales y futuros sigan siendo confiables, incluso, conforme se transforman con el auge de las tecnologías de energía limpia.

Editor Magazieee

Hernán Saragozín Armas

Hernán Saragozín, miembro IEEE desde enero del 2017. Riobamba, capital de la provincia de Chimborazo, 6 de marzo de 1993. En el 2010 obtención del título de Bachiller Técnico Industrial Eléctrico en el Instituto Tecnológico Superior Carlos Cisneros. En el 2014 obtención del título de Tecnólogo Electromecánico en el Instituto Tecnológico Superior Carlos Cisneros. En el 2020 obtención del certificado de egresado de Ingeniero Eléctrico en la Universidad Politécnica Salesiana.