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Editorial

¿Chatterbot o panóptico?

La reciente moda de sistemas que interactúan en lenguaje natural para resolver problemas de diversos tipos, recrear y aumentar el contacto permanentemente con los usuarios son los objetivos reales. Algunos ya son fanáticos de estas tecnologías que, si bien usan a los chatters, son mucho más que eso. Otros le temen y hasta hay países que han tomado medidas drásticas para proteger a la gente, ya que podría ser un trampolín a situaciones muy complejas a nivel social e individual.

Son muchos y bien antiguos los antecedentes de los primeros chatters o robots de software o asistentes virtuales. Si bien nacieron como una mera burla y una recreación de ciertas empresas en las primeras horas de la vida de internet, pasaron por altibajos y fueron mutando de objetivos hasta llegar a ser una interesante manera de interactuar con los dispositivos. Es cierto que las empresas más poderosas han realizado demostraciones tan impactantes como forzadas y falsas del gran poderío de estas tecnologías. La triste realidad es que los avances en procesamiento de lenguaje aún La triste realidad es que los avances en procesamiento de lenguaje aún los coloca bastante lejos de ser un asistente virtual completo.

Paradójicamente luego de más de 30 años de idas y venidas las empresas retoman la idea de atraer a los usuarios, generarles dependencia y así tener incautos consumidores de horas y horas de vida digital. Pero esta vez la idea no es solo cobrar por ese consumo, sino además obtener el tesoro más precioso del siglo XXI: información personal de todos los individuos y de sus entornos. Esto no sería para nada peligroso si el usuario estuviera consciente de lo que realmente está entregando: su preciosa intimidad e individualidad, agravado por el hecho de que se lo entrega a una entidad anónima que puede hacer lo que desee con ella.

Claro que esto no se frena allí: hay para las empresas también. Tus planes, innovaciones y todo lo que pase directa o indirectamente por las garras de estos sistemas serán parte del nuevo panóptico de información, un monstruo que crece segundo a segundo y que pretende tener el poder de la información de individuos y entidades de todo orden, de modo que estará en posición de prever cualquier comportamiento, debilidades, oportunidades, y posiblemente todo instrumento invisible que penetre la siquis de una comunidad y sus entidades.

No se necesitan policías, los propios esclavos entregan sus manos a los grilletes creyendo que son libres de elegir. Pero no se plantean salir del sistema, algo similar a lo que sucede con redes sociales como el WhatsApp. Solo unos pocos se atreven a no pertenecer al círculo so pena de sentirse excluido (sensación que estas empresas remarcan directa e indirectamente en sus mecánicas para con los usuarios).


Desde el IEEE Argentina se han evaluado estas temáticas con dos paneles: uno de perspectiva social y comunitaria, tomando una encuesta al público sobre estas cuestiones, y otra para evidenciar las tecnologías detrás de estos sistemas: qué es un asistente virtual y por qué estos nuevos sistemas en realidad son sistemas de aprendizaje profundo de información ocultos detrás de chatters.

IEEE AR CIS

PANELES «SOCIEDAD Y CHATBOTS: EL CASO CHATGPT»

Están disponibles las grabaciones de los paneles sobre «Sociedad y Chatbots: El caso ChatGPT» realizados el 16 y el 30 de junio. https://events.vtools.ieee.org/m/362150

* 16 de junio: «Sociedad y Chatbots: El caso ChatGPT. Charla informativa«

* 30 de junio: «Sociedad y Chatbots: El caso ChatGPT. Evaluación Técnica«

Los mismos fueron organizados por la Sección Argentina del IEEE y el Capítulo Argentino de la IEEE Computational Intelligence Society, con el auspicio del Instituto de Comunicaciones Digitales de la Sociedad Científica Argentina.


Daniela López De Luise

Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires

Coordinadora Académica CETI